MANTENIMIENTO Y USO CORRECTO DE LAS CUCHILLAS

Mantenimiento y uso correcto de las cuchillas

Tanto el mal uso, como un mal mantenimiento de las cuchillas nos llevan a un mismo destino;

ROTURA DE NUESTRAS MÁQUINAS Y CUCHILLAS POR FALTA DE LUBRICACIÓN TRADUCIDA EN VARIOS PASOS PREVIOS:

·       Calentamiento excesivo de las cuchillas.

·       Calentamiento de la máquina llevándonos con el tiempo a avería prematura de la misma.

·       Pérdida prematura de los filos de fábrica o afilados.

·       Marcas en el pelo o corte con “extraños”.

·       Vibraciones.

·       Ruidos molestos e incluso insoportables.

·       Rotura de las cuchillas o sus piezas.

Las formas más sencillas a nuestro alcance para evitar que estos problemas se produzcan prematuramente son los siguientes;

a)    La lubricación adecuada de las cuchillas, entendiendo por adecuada la que recomiendan los principales fabricantes de máquinas y cuchillas que se basa en varios parámetros:

1.    Correcta frecuencia de la lubricación; antes, DURANTE y después de cada uso, especialmente durante el precorte, momento del trabajo en el que más se castigan las cuchillas al estar el pelo sucio y/o con nudos.

2.    Puntos correctos de la lubricación; zona de corte, zona de la guía de nylon y apoyo trasero de las mismas.

3.    En este mismo sentido y como dato súper importante, comentar que no se deben usar las cuchillas en pelo mojado por los siguientes motivos;

·       Facilita que los pelos puedan introducirse sin ser cortados entre ambas piezas de la cuchilla y en consecuencia trancarlas, viene siendo el mismo efecto que empujarlas a la fuerza cuando no entran bien.

·       Si quedan húmedas y no se secan y lubrican adecuadamente, se oxidarán dañando en primer lugar el filo, que es la zona más fina y delicada de la cuchilla.

·       En consecuencia directa, al estar el pelo mojado esa humedad desplaza el aceite que deberíamos haber aplicado en las cuchillas, ayudando aún más a destrozarlas.

b)    Limpieza de las cuchillas; la limpieza de las mismas nos asegura que ningún agente afecte al deslizamiento, lubricación correcta y por tanto al corte de las mismas, para las cuchillas de la 0000 a la 5-5F, podemos usar perfectamente un cepillo de dientes de dureza media, el cual aportará una limpieza más consistente que la del típico cepillo de regalo con la máquina, para cuchillas de números mayores deberemos buscar un cepillo con las cerdas más largas.

c)     No forzar las cuchillas introduciéndolas en medio de masas compactas de pelo y suciedad (nudos), las cuchillas deben cortar entre la piel y esta masa de pelo compactada, es decir, justo por debajo del nudo, eligiendo la medida de la cuchilla, siempre que esto sea posible, en base al estado del pelaje del animal, intentando siempre no dañar la cuchilla “forzándola”. Llamamos forzar a introducir la cuchilla en el pelo a base de empujarla, por la fuerza y sin fluidez, esto no es un problema de calidad de la cuchilla o el afilado, sino de los usuario que muchas veces por ahorrarse el trabajo de sacar los nudos o viéndose incapaces de hacerlo, optan por hacer entrar las cuchillas, sí o sí. No forzarlas es una indicación lógica, coherente, las cuchillas son para cortar pelo, no tierra o pequeñas piedras… lógicamente, habrán casos en los que el nudo esté demasiado pegado a la piel y tomemos la opción de atravesar el nudo con la cuchilla, en este caso lo ideal sería intentar deshacer o abrir el nudo previamente, con unas tijeras por ejemplo, abriendo un camino por el que la cuchilla pueda entrar más fácilmente, así como tomar cualquier opción que nos permita reducir la densidad de dicha masa de pelo.

En este mismo sentido es obvio que la elección de la cuchilla correcta es una de las cosas más importantes a la hora de usarlas y desgraciadamente, much@s profesionales utilizan para el precorte cuchillas para acabado...

Teóricamente lo hacen para tener menos riesgo de cortar al perro, cosa totalmente loable pero según profesionales con los que he hablado del tema es algo totalmente equivocado ya que ese riesgo puede tener sentido en ciertas zonas propensas a ser cortadas pero no en todo el perro y muchas veces hay un exceso de prudencia incluso en zonas del perro donde no hay un riesgo real de corte porque la cuchilla sea para precorte...

Todo tiene un precio... las cuchillas para acabado “F o FC” no tienen la capacidad de penetración que poseen las cuchillas para precorte y esto supone que si se usan durante el precorte se van a usar inadecuadamente, empujándolas hasta que entren sí o sí, o se tranquen... lo que va a ocasionar que podamos dejar sin cortar una cuchilla recién estrenada o recién afilada en cuestión de semanas, días o incluso minutos dependiendo de cuánto la presionemos y de cuántas cosas se hagan mal a parte de esta mala elección.

Este uso inadecuado lo veo continuamente. A mi entender, en cuchillas 7F puede ser comprensible dado que la altura de las 7F y 7 hace más probable cortar la piel en ciertas zonas propensas a ello...

Pero en ese mismo sentido se están usando inadecuadamente las 5F, 4F, 3F... y yo hay medidas que no alcanzo a entender de qué manera se podría cortar a un perro aún en zonas de riesgo dado que la altura de corte hace inviable cortar la piel.

Creo que debe haber gente que por comodidad y por ahorrar dinero en material extra están usando las cuchillas “F” para todo, con todas las consecuencias que eso tiene.

d)    Guardar las cuchillas lubricadas y evitar en todo caso que queden en un lugar húmedo o con restos de humedad, para esto, a parte del aceite normal de trabajo, podemos optar por aceites más económicos para su limpieza como WD40 entre otros, si bien yo recomiendo sólo WD40.

e)    Evitar en la medida de lo posible el uso de refrigerantes, ya que son productos altamente corrosivos, en caso de usarlos, usar sólo marcas de reconocido prestigio como Andis, Wahl, Óster… jamás marcas de gamas bajas. Y siempre, en el mismo acto que usemos el refrigerante, echar aceite generosamente para limpiar cualquier resto de estos productos corrosivos que dañarán nuestras cuchillas empezando por el filo, que es la parte más delicada de nuestras cuchillas.

f)      Las vibraciones son un problema generado por dos causas;

1.    El desconocimiento del modo en que la cuchilla está sujeta a la máquina; la pieza que hace que la cuchilla se ajuste a la máquina y no vibre lateralmente es el casquillo, concretamente las orejetas del mismo, que dan sostén lateral a la cuchilla respecto de la máquina. Cuando ponemos la máquina sobre la mesa con una cuchilla en ella y apoyamos primeramente la cuchilla sobre la mesa dicho contacto se traslada totalmente a las orejetas del casquillo ocasionando su separación y por tanto que la cuchilla empiece a vibrar, dicha vibración será mayor cuanto mayor sea la separación entre las orejetas del casquillo.

2.    Los accidentes como caídas de la máquina con una cuchilla puesta pueden suponer los problemas siguientes;

·       Una gran separación de las orejetas ocasionando en una sola caída unas vibraciones que dificulten en extremo o hagan imposible su uso.

·       La rotura de alguna de las orejetas ocasionando de hecho que sea imposible su uso y sea necesario cambiar la pieza.

·       La deformación de la pieza de sujeción en la propia máquina, ocasionando que a partir de aquí todas las cuchillas vibren con la máquina.